No es tarde si llega y así ha ido llegando el interés por la historia. A trompicones. Muchos años después de haber sido explicada por otros, que dejaron poca huella más allá de la desamortización de Mendizábal y el placer de los mapas. Llega de manera selectiva. De repente, una lectura, un viaje, una referencia se queda más tiempo del normal y lo normal es querer saber más. Empezar a leer, a buscar, a preguntar y a compartir.
He tenido un par de obsesiones históricas y ahora me ha vuelto a pasar. Llevo dos semanas entusiasmada desenredando la madeja de los aqueos y los pelasgas, los estados-nación. Los tebanos, los atenienses y los espartanos. Los persas y la eterna pelea. Llevo dos semanas feliz con Heródoto y sus reintérpretes. Con las deidades del Olimpo. Zeus, Alcmena y Hércules. Con los Siete Sabios.
Ha vuelto y no es tarde si llega pero a este paso no me quedará vida suficiente para saber todo lo que intuyo que me gustaría. Para verlo con mis propios ojos, aunque no encuentre más que ruinas. Para, con lo acumulado, concebir una respuesta a cómo deberíamos hacerlo hoy. Día a día.
Historia: Narración y exposición de los acontecimientos pasados y dignos de memoria, sean públicos o privados.
miércoles, 8 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario